Un día como hoy hace 25 años, Barcelona se asomó al mundo para decir HOLA!
Hoy recordamos cómo fue ese día con los mejores elementos del evento que transformó la ciudad.
Después de un desfile desde la Villa Olímpica de Poblenou, 170 países se encontraban en el Estadio Olímpico para comenzar la ceremonia de apertura, dirigida por Manuel Huerga.
Barcelona sabía que no podía fallar. Con puntualidad estricta, se daba el pistoletazo de salida con una representación de un HOLA gigante, seguido de anillos olímpicos formados a ritmo de sardanas, cantadas por Josep Carreras y Montserrat Caballé.
Seguidamente, La Fura dels Baus representaba la separación de los continentes Europa y África formado así el Mar Mediterráneo. Castellers, timbaleros, sevillanas, flamenco, y jotas, se sumaban a la celebración, junto con representaciones de pintura, arquitectura y un desfile de moda.
El mejor momento de Barcelona ’92
La imagen de aquel 25 de julio fue la famosa flecha en llamas que lanzó Antonio Rebollo. El icono se estuvo probando en Montjuïc durante dos meses. Sin embargo, las flechas se apagaban al instante y se desviaban, por tanto, había que cambiar el diseño y utilizar un combustible especial. La mañana de la inauguración, una red de protección tapaba los espectadores por si la flecha se desviaba, pero la sacaron: había que correr el riesgo. Expectación máxima. Rebollo iluminó el pebetero y Barcelona respiraba tranquila. “Ahora sí, ya está”.
El Logotipo: un salto a la era moderna
Los miembros del COOB’92 escogieron el logotipo de Josep Maria Trias que mostraba un individuo dibujado con dos trazos sencillos y un punto, con los brazos estirados como símbolo de energía. Este saltaba sobre una valla formada por los aros olímpicos. Los colores pertenecían a los propios de la ciudad y país. El punto azul de la cabeza correspondía al Mediterráneo, el rojo a la vida, fuego y libertad, mientras que el amarillo se asociaba al sol, luz, intelecto y los valores humanos.
La Mascota: el dulce y amable Cobi
Cobi fue la mascota de los JJOO del 92. Este era un perro pastor catalán de estilo cubista diseñado por Javier Mariscal. De millones de réplicas, quizás más recordada fue la de la ceremonia de clausura, donde aparecía Cobi sobre un barco de papel hinchable que acababa despegando hasta el cielo.
La Música: Barcelona, amiga para siempre
Todos recordamos la mítica canción Barcelona de Montserrat Caballé y Freddy Mercury, grabada en 1987. Los dos intérpretes debían cantar la canción en la ceremonia de apertura pero la prematura muerte de Mercury en noviembre de 1991, lo hizo imposible. Sin embargo, la canción fue presente acompañada de un vídeo.
Este 1992, Andrew Lloyd Webber y Don Black compusieron la canción Amigos para siempre, interpretada a la apertura por José Carreras y Sarah Brightman. Esta, sin embargo, se popularizó con la versión rumbera de Los Manolos, representada también en la ceremonia de clausura.
Todos estos hechos más la transformación que vivió la ciudad Condal, hicieron que Barcelona se abriera al mundo y fuera popularmente conocida, dejando atrás el blanco y negro para volverse moderna y llena de color.